Los estadounidenses eligieron al presidente Donald Trump con la esperanza de que combatiera la inflación e impulsara la economía estadounidense, pero a medida que se acerca a su centenario en el cargo, califican al republicano de forma negativa por su gestión de ambas cuestiones, según una nueva encuesta de Reuters/Ipsos.
Trump comenzó su mandato con una agenda económica agresiva, desatando guerras comerciales al imponer aranceles a los principales socios comerciales de EU, intentando presionar a la Reserva Federal (Fed) para que se doblegue a su voluntad y provocando la peor ola de ventas en los mercados financieros estadounidenses desde los primeros meses de la pandemia de Covid-19 hace cinco años.
Solo el 37% de los encuestados aprueba la gestión de la economía por parte de Trump, una cifra inferior al 42% registrado en las horas posteriores a su investidura el 20 de enero, cuando prometió impulsar la economía y dar paso a una “Edad de Oro para Estados Unidos”. La lectura está muy por debajo de la registrada en cualquier momento de su primer mandato, cuando oscilaba entre 45 y 55 puntos porcentuales.
“Tenemos un presidente que prometió una época dorada”, afirmó James Pethokoukis, investigador principal del American Enterprise Institute, un centro de estudios conservador. “Pero todo lo que se supone que debe subir, baja; todo lo que se supone que debe bajar, sube”.
Pethokoukis afirmó que las señales de alerta económica presionan a Trump para que dé marcha atrás con los aranceles, pero que incluso si Trump cede, la economía podría no recuperarse rápidamente en medio del caos.
En una encuesta de Reuters/Ipsos realizada justo después de la investidura de Trump, alrededor del 55% de los encuestados afirmó que la inflación o la economía en general deberían ser la principal prioridad de Trump en sus primeros 100 días en el cargo, que finalizan el 30 de abril. El 23% se centró en la inmigración.
Tres meses después, tres cuartas partes de los encuestados expresaron su preocupación por la inminente recesión. El 56%, incluyendo uno de cada cuatro republicanos, afirmó que las medidas de Trump para reactivar la economía son “demasiado erráticas”.
Dos tercios de los encuestados expresaron su preocupación por el mercado bursátil, donde los precios de las acciones cayeron drásticamente en las últimas semanas debido a la preocupación de los inversores por los planes de Trump de aumentar los aranceles a las importaciones y su insinuación de que podría despedir al presidente de la Fed, Jerome Powell, el principal funcionario del país encargado de controlar la inflación.
El índice bursátil de referencia S&P 500 se encuentra aproximadamente un 14% por debajo de su máximo anterior, alcanzado el 19 de febrero. Los precios al consumidor subieron un 2.5% en el año hasta febrero, muy por encima del objetivo del 2% de la Reserva Federal.
El 52% de los encuestados se mostró de acuerdo con la afirmación de que “las acciones de Trump podrían dificultar mi vida cómoda al jubilarme”, superando al 31% que discrepó con la afirmación.